La mayoría de las hernias umbilicales (alrededor del 90 %) se cierran solas y no ocasionan problemas. El tamaño del orificio en el músculo (y no la distancia que sobresale la hernia) es un mejor indicador de si la hernia se cerrará por sí sola. Dado que la mayoría de las hernias umbilicales no causan problemas, es seguro esperar hasta que su hijo tenga cerca de 3 años, en dado caso de que la hernia no cierre la única forma de corregirlo es vía una cirugía.
Aquellas hernias umbilicales que requieren cirugía suelen presentar estas características
Son dolorosas
Tienen un diámetro ligeramente más grande que 1/4 a 3/4 de pulgada (1 a 2 centímetros)
Son grandes y no disminuyen de tamaño durante los primeros dos años de vida
No desaparecen hacia los 5 años
Quedan atrapadas o bloquean el intestino